Esta madrugada la gata, que dormía a los pies de la cama, se despertó de un sobresalto.
-Estaba teniendo pesadillas -me dijo. Y me contó:
*Tenía que ir a pagar el gas porque se vencía la factura.
*Pero de pronto, todo a mi alrededor se inundaba, y yo iba flotando en un cartoncito, usando la factura de gas como vela, porque ni loca metía una pata en el agua para remar.
*Después no sé bien, pero ya no había agua. Estaba en una fiesta de disfraces y todos me tiraban de los bigotes como si mi cara de gata fuera una máscara. Había disfraces muy raros. Yo los espantaba con la factura hecha un rollito. Uno disfrazado de ornitorrinco le quería mirar a todos la garganta.
-Otorrinolaringólogo, querrás decir -acoté entre sueños.
-Bueno, capaz era eso, pero tenía pico de pato, qué sé yo.
*Atravesaba todo el salón lleno de gente y llegaba a un parque. Pero un parque lleno de sábanas tendidas y ropa colgada, como secándose al sol, sólo que era de noche. Parecían fantasmas, así que corrí y corrí con los ojos cerrados y tapándome la cara con la factura.
*Cuando abrí los ojos, estaba en la cola de pagar. La cola era interminable. Cuadras y cuadras de gente esperando. "Es que se cayó el sistema", dijo alguien. Me apantallé con la factura, cual abanico, para espantar la mufa que tenía.
*Y ahí me di vuelta, a ver si encontraba otro lugar para pagar la factura, pero me caí de la cama y me desperté. Cuestión es que hoy te toca a vos ir a pagar el gas.
30.4.07
Pesadilla de gato
Suscribirse a: