17.8.11

Alegría de zorrito

Casi no lo escucho, pero me levanté para ir al baño y por las dudas me asomé a la cocina. Lo estaba esperando. Le había dejado especialmente unas almendras frescas y una factura con membrillo.
El zorrito de cocina estaba cerrando un paquete con un hilo. Y parecía bastante enredado.
—¿Te ayudo? —ofrecí.
—Ante todo, decile al cocodrilo ese que orejón su tatarabuelo dinosaurio.
—Bueno, creo que tenemos que agradecer que no le gustamos...
—Si serás tonta a veces, eh.
—¿Gracias por lo de a veces?
El zorrito finalmente logró hacer un nudo con el hilo. Y yo logré reponerme un poco:
—No sé cómo se combate un cocodrilo de bañadera. No estaba en el contrato de alquiler. Tal vez convenga avisarle al dueño.
El zorrito hizo uno de sus típicos tsk tsk. Me dio un papelito y el paquete.
El papelito decía:

Cosas que te dan alegría inmediata:
*El olor a tostadas.
*La risa de los sobrinos.
*Un rato de buena lectura.
*La siesta al sol.
*Un abrazo.
*La luna.
*El mensaje que te mandó un amigo el otro día. 
*El chocolate con mazapán.
*Papeles de colores.
*Esa cancioncita.
*Un anillo perfecto.
*El perfume del jazmín chino que está por florecer en estos días.
*El queso.
*Esos lunares.
y así.

—Es para que la sigas vos la lista. Y para contrarrestar esa de los miedos del otro día, que no me gustó nada.
—Estoy segura de que no lo hizo con mala intención el cocodrilo. Hay días así, donde uno está más miedoso, ¿o me vas a decir que a vos no te pasa?
Me miró fijo. Hizo tss tss esta vez, como diciendo "no sé de qué hablás" o "mejor ni te cuento".
Abrí el paquete.
—Pero... estas son mis propias antenitas de los cumpleaños. ¿Cómo me regalás algo que ya es mío?
—¿Todo te tengo que explicar? Es para que no te olvides de usarlas hoy. Más que nunca. Los zorritos solo regalamos cosas importantes en los cumpleaños.
Guardó en su bolsillo zorrito todas las almendras que le entraron y se quedó con la factura en la mano.
Cuando se estaba yendo por la ventana dijo:
—Ah, y estás invitada a la próxima fiesta en la terraza. Inauguración de temporada. En primavera.
Me volví a la cama. Y solo tuve sueños alegres por el resto de la noche. Y un poco emotivos también.

3.8.11

Miedo de cocodrilo

Lo vi por última vez hace casi un año. Por eso me había olvidado y entré como si nada al baño y pegué un salto y un grito (todo a la vez) y revoleé el cepillo de dientes que ya tenía en la mano.
Es que un cocodrilo en la bañadera, muy pancho, tirado panza arriba, tomando un trago, como si estuviera en una playa del caribe no es algo que se vea todos los días. Que mi casita será un poco desordenada, pero no es un zoológico.
No bien se acabó mi grito, preguntó:
—¿A qué le tenés miedo vos?
Entonces me quedé muda.
—Che, no es una pregunta tan difícil. A ver, empiezo yo... ¡No! La idea es que vos hagas una lista. Y te arregles un poco el pelo, que lo tenés hecho un desastre.
—Ah, me voy acordando de lo lindo que es charlar con vos. ¿Qué querés? Son las dos de la mañana, tuve un día complicado, no hay peinado que dure hasta esta hora.
—Yo sé que no te peinás a ninguna hora. —dijo bajito, mirando para el frente, donde debía estar viendo olas imaginarias, como si nada.
—Bueno, a veces... un poco... uso crema de enjuague... —me recompuse—: igual, a mí me gusta mi pelo. ¡Y fui hace poco a la peluquería!
—'Ta bien, 'ta bien, manejate —dijo sacudiendo una garra suavemente, como si estuviera desmereciendo mi afirmación o espantando algún mosquito playero de su mundo de fantasía—. Igual, no vine para eso. Vos sabrás lo que tenés en esa cabeza. Yo vine a tirarte ideas para listas, porque este blog me da pena. Y decí que ese zorro es muy orejón para mi gusto, que si no, un día me lo zampo de un bocado y ahí te quiero ver. Pelado el blog, como van a quedar los huesos del zorrito ese. Y la primera es esa: ¿qué cosas te dan miedo?
Te dejo la inquietud.
Y ahí nomás se zambulló, como la otra vez, como si fuera en la pileta del hotel de sus sueños, a través del desagüe de la bañadera, y desapareció.
Tardé un momento en reaccionar. Levanté el cepillo de dientes, lo enjuagué, y mientras ponía dentífrico para lavarme empecé a pensar...

Lista de cosas que me dan miedo
*Las alturas.
*El viento.
*Las mandíbulas de los perros que son más grandes que mi mano.
*La oscuridad.
*Los pensamientos repetidos.
*Los pensamientos oscuros.
*El dolor de huesos.
*La tintura de pelo.
*Los vidrios en la playa.
*Perder un papel, una lapicera, unas llaves.
*El miedo.
*Perderte.
*Perderme.

1.8.11

Lecturas de JULIO 2011

*El hombre del toque mágico, de Stephen Vizinczey.
*Floreros de alabastro, alfombras de Bokhara, de Angélica Gorodischer.
*Tumbas de jaguar, de Angélica Gorodischer.
*Margot. La pequeña, pequeña historia de una casa en Alfa Centauri, de Toño Malpica.
*Chamario, de Eduardo Polo, ilustrado por Arnal Ballester.
*El gran zoo, de Nicolás Guillén, ilustrado por Arnal Ballester.
*Nothing is Simple, de Sempé.
*Everything is Complicated, de Sempé.