26.1.05

Ansiedades

*Esperar el resultado de un examen médico.
*Esperar la nota de un examen.

***Ansiedad del día***
*Esperar a mañana a la mañana para devolverle el llamado a la inmobiliaria a la que le alquilo el departamento.

19.1.05

Rito urbano

Cuando salí de la oficina, apenas garuaba. Pero a las dos cuadras, de pronto, empezó a caer granizo. Mi paraguas rotoso no iba a poder soportarlo, así que me refugié bajo el alero de un kiosco de diarios y revistas, todavía abierto. Éramos cuatro transeúntes, un vendedor de la plaza, y dos señoras que atendían el kiosco.
Los comentarios de rigor sobre el clima loco y tropical, y un señor, de improviso, se aleja un poco del alero y empieza a juntar bolitas de hielo del piso.
*Una para usted,
*una para usted,
*otra para usted,
*sírvase,
*una por aquí,
*sírvase, por favor.
Nos convidó a todos, y nos quedamos cada uno saboreando en silencio la piedrita fresca.
Paró un poco la tormenta. Rearmé como pude mi paraguas rotoso y caminé las dos cuadras que me quedaban hasta la parada del colectivo. Un poco más hermanada con vaya uno a saber qué.

18.1.05

Dieta balanceada (o Chica Kiosco # 1)

Hoy comí las siguientes golosinas (en este orden):
1 Mantecol (de los más chiquitos).
1 medallón de menta Felfort (los Suchard eran notablemente más ricos).
1 Marroc (sí, a pesar del calor, el kiosco de enfrente de la oficina tiene aire acondicionado y mi oficina también, el único riesgo fue cruzar la calle, pero sobrevivimos, el Marroc y yo... bueh, el Marroc no mucho tiempo más).
1 BonoBon (sin comentarios, sólo lo tenía a mano).

Definitivamente tengo que replantear mis fuentes de energía. Sin embargo, hoy que volví a comer golosinas después de un período voluntario de abstinencia, ya me siento mejor. No hay caso, no encuentro un reemplazo.
El azúcar y la kriptonita van a terminar conmigo.
¡Y las hormigas con mi balcón!

Menú del día

*Entrada:
Un error más encontrado una vez que el trabajo estaba aprobado.
Una exquisita imagen cortada de raíz y servida donde todos la van a notar.
*Plato principal:
Llamada al proveedor para reclamar.
Este plato lo sorprenderá, el proveedor es cosecha especial: trece años de resentimiento acumulado lo deleitarán frente a su reclamo. Los gritos se sirven bien calientes. Hay que lavarse las manos para estar a tono.
*Bebida sugerida:
Un cóctel de llanto y nervios gratis.
Su sugerente aroma perdura horas.
*Postre:
Urgencias varias.
A elección entre una amplia variedad de apuros, trabajos pendientes, trámites inconclusos, mensajes urgentes y motos perdidas, todo bañado en una salsa de agria desidia.

Por supuesto, acompañado por nuestros mejores camareros capaces de cualquier cosa para que la culpa se la lleve usted, y servido en el siempre helado ambiente de nuestro local.

FYI (lista de un sólo ítem)

*Si uno decide cambiar -y cambia-, al resto de la gente probablemente le lleve un tiempo darse cuenta y actuar en consecuencia. Hay que tener mucha paciencia.
Corolarios:
-En general, cuando uno cambia, igual tiene que arreglar las macanas que se mandó antes de cambiar.
-Hay veces en que cuando uno cambia, los demás ya se cansaron de cómo era uno antes y ni siquiera tienen ganas de darse cuenta de que uno cambió.
-Hay veces en que simplemente ya es tarde.

Perdón, me puse seria. Es que se me acabó el chocolate.

5.1.05

Bad Karma Day

*La vida no te sonríe, más bien se ríe de vos.
*Es un hecho: si estás enojado con el mundo, el mundo se enoja con vos. No hay manera.
*Por más que sepas perfectamente dónde están las baldosas flojas en las cinco cuadras que caminás de ida y vuelta todos los días, por más que haga días que en esta ciudad el sol raja la tierra y no caiga una gota de agua, siempre, ¡pero siempre! hay un gil que viene caminando de frente y pisa justo la baldosa que salpica directo a tus piernas y las convierte en modelos para un spa con tratamiento de barro. ¡GRRRR!